2000
Durante el reinado de Pedro I (1350-1369) se produce una violenta reacción de la nobleza frente al autoritarismo monárquico, que dará lugar a una guerra civil en medio de una grave crisis económica y demográfica, entre Pedro I y la mayoría de la nobleza, que apoya las pretensiones al trono de Castilla de los hermanos bastardos del rey, encabezados por Enrique de Trastamara. La lucha adquiere el carácter de contienda internacional enmarcada en la Guerra de los Cien Años: Pedro I acude al apoyo inglés, Enrique al de Francia.
España, 1985
Enrique II, Alcázar de Segovia.
El triunfo de Enrique II de Trastamara (1369-1379) tras el asesinato de Pedro I en Montiel, supone la entronización de una nueva dinastía, pero, sobre todo, el fortalecimiento de la nobleza, que a través de las "mercedes enriqueñas" acrecienta sus rentas y señoríos y aumenta su poder. La nueva nobleza ocupa los puestos claves del gobierno convirtiéndose en una oligarquía de funcionarios al servicio del rey, pero cuyas ambiciones políticas no cederán en los años siguientes.
España, 1988
Enrique III, Primer Príncipe de Asturias
Ya en el siglo XIV, el nuevo enfrentamiento entre nobleza y monarquía se acentúa en los reinados de Juan II (1406-1454) y Enrique IV (1454-1474). Las luchas se complican al intervenir en ellas los infantes de Aragón, viviéndose en Castilla un estado de completa anarquía. La actitud levantisca de la nobleza en el reinado del débil e indeciso Enrique IV llega hasta el extremo de que ésta proclame rey a su hermanastro Alfonso (Farsa de Ávila) y que a la muerte de éste le obligue a aceptar como sucesora a su hermana Isabel (Pacto de los Toros de Guisando), en detrimento de los derechos de su hija Juana (la Beltraneja).A la muerte de Enrique IV (1474) Isabel es proclamada por sus partidarios reina de Castilla. Comenzará una nueva guerra civil que concluirá con la victoria de Isabel respaldada por Fernando y con el establecimiento definitivo de la monarquía autoritaria de los Reyes Católicos.
España, 1939
Isabel I
Isabel I
